Las manzanas caen a causa de
la ley de la gravedad –añade todavía en esa misma carta- es una proposición
verdadera pero falsa. Es verdadera porque es verdad que las manzanas, en
general, caen (y nosotros con ellas). Pero es falsa por todas estas razones:
porque toda proposición es falsa, porque las manzanas no son manzanas, la ley
no es ley, la gravedad no es gravedad y Newton no era Newton, del mismo modo
que Napoleón –como todo el mundo sabe o repite- era tan sólo un loco que se
creía Napoleón.
Ahí estamos. Hoy hablamos de una novela bastante buena, pese a cierto aire de película española de los 80 de José Sacristán que la sobrevuela. De todas las razones por las que la proposición es falsa me sobran todas menos la de 'toda proposición es falsa'. Como en el chiste de:
- No hemos tocado las campanas por varias razones, la primera de ella es que no tenemos campanas...
- Me sobran las demás razones.
Y ahora una conexión rara: José Mª Vaz de Soto (¿ya no escribe en El Mundo?) y David Foster Wallace son los autores que mejor han descrito la depresión; este libro junto con el relato 'La mujer deprimida' de DFW son con los que mejor te puedes hacer una idea de lo angustiosa que puede ser esta enfermedad. Otra coincidencia entre estos dos autores tan lejanos geográfica y generacionalmente es el uso irónico y postmoderno de los paréntesis, ahí dejo la pedantería.