lunes, 18 de febrero de 2013

AL SUR DE GRANADA (GERALD BRENAN) Y LA BOTÁNICA


El botánico puede que tenga interés en dos plantas más bien insignificantes que crecen a lo largo de esta costa. Una es un arbusto espinoso de flores blancas, de la misma familia que el bonetero y llamada Catha europea. Está emparentada muy de cerca con la Catha edulis, en árabe kat, cultivada en Yemen y Albania debido a su riqueza en cafeína. Se hace de ella una bebida deliciosa, a medias entre el café y la manzanilla, pero, según me han dicho, con un ligero sabor a estiércol de avestruz. Pensando que el precio del café en España es en la actualidad de trece chelines la libra, uno se pregunta por qué ningún químico emprendedor ha pensado en dar a este arbusto, actualmente inútil, alguna utilidad. La segunda planta que debe ser reseñada es una especie enana y leñosa, sin hojas, que crece sobre los acantilados de la costa y se llama efedra. De ella se extrae la sustancia de uso medicinal llamada efedrina, y además posee notable interés botánico. Sus órganos primitivos de floración demuestran que pertenece a la familia, antes muy extensa pero hoy muy reducida, de las gnetáceas, que forma el eslabón entre las que florecen y las gimnospermas, en la cual se da una de las más sobresalientes extravagancias vegetales, la welwitschia, del sudoeste de África

La Botánica no es mi fuerte y tampoco, para qué negarlo, mi pasión. La mayoría de la gente que lee 'Al sur de Granada' cada veinte páginas suelta el libro y dice para sí: cómo ha cambiado España. Y es verdad. Cuenta Gerald Brenan que recién instalado en Yegen, las mujeres del pueblo se sorprendieron mucho cuando lo vieron aparecer en la fuente buscando agua, porque esto era una tarea femenina. Las mujeres se molestaron y no le dejaron recoger agua, ellas mismas se la llevaron a su casa. Los tiempos han cambiado mucho, porque ahora, cada vez que subo a la azotea a tender la ropa, las mujeres, en vez de tender mi ropa ofendidas, disfrutan aconsejándome los mejores sitios para tender

lunes, 4 de febrero de 2013

PI, FE EN EL CAOS (ARONOFSKY) Y EL PRINCIPIO DE ARQUÍMDES


'Pi, fe en el caos' es una película de culto de 1998, aunque para mi gusto es un poco castaña. Creo que el principio de Arquímedes está más o menos bien explicado en esta escena, si uno no se pone muy riguroso. En 'Los diez experimentos más bellos de la Física' Manuel Lozano Leyva cuenta cómo fue en realidad la cosa. Parece ser que lo que Arquímedes debió introducir en la bañera fue una balanza con la corona problema igualada con una masa igual de oro y al sumergirla los distintos empujes demostraron la estafa.
En cualquier caso el vídeo está lleno de buenos consejos para el hombre en general, no sólo para el científico:
- Lávate y haz caso a tu señora