LA MITAD EVANESCENTE (BRIT BENNETT) Y LA DIVISIÓN DEL ÓVULO

 Pero nunca volvieron. En lugar de eso, transcurrido un año, las gemelas se separaron, y sus vidas se dividieron en dos como el óvulo que en otro tiempo compartieron.

Si esta bitácora sirviera como catálogo de usos sensatos y adecuados de la ciencia en la literatura este sería un buen ejemplo. La metáfora que hoy nos ocupa no es la más fina del mundo pero funciona bastante bien, está bien traída. Es realmente misterios la división del óvulo que es por otro lado la que lleva al crecimiento embrionario.

Quizá el lector haya notado que la Biología no es mi especialidad, pero sirva esta entrada para hablar de esta curiosa novela en la que aparece el fenómeno de las personas de raza negra que son de piel clara y no lo parecen, y pueden por tanto hacerse pasar por blancos. Buen material para una novela, como quedó demostrado también con La mancha humana, de Philip Roth

LOS ASQUEROSOS (SANTIAGO LORENZO) Y EL PRIMER PRICICIPIO DE LA TERMODINÁMICA

 Le gustaba la calefacción que la actividad física regala. «Cortar la leña me ahorra quemarla», decía. El remedio se comía al problema antes de que surgiera.

Parece un buen ejemplo de transformación de trabajo en calor bajo el cobijo de la Termodinámica. Todos nos hemos frotado las manos alguna vez para deshacernos del frío. Así llamamos al calentamiento físico deportivo, porque a través del movimiento calentamos los músculos. La transformación inversa, de calor en trabajo, goza de mayor prestigio histórico ya que dio origen a la Revolución industrial a través de la máquina de vapor. Parece ser, sin embargo, que esta transformación es menos eficiente. Quedémonos con la última frase, una especie de reverso amable de ‘en el pecado lleva la penitencia’