lunes, 20 de noviembre de 2017

EL TEJADO DE VIDRIO (ANDRÉS TRAPIELLO) Y LA IMPORTANCIA QUE LOS CIENTÍFICOS OTORGAN A LA LITERATURA

Al entrar nos detuvo una vaharada con los olores de la cocina y del comedor, donde indiferentes a Moreno Villa y al mismísimo Lorca (que en la gloria estén) trasegaban la cena otros residentes científicos, médicos, ingenieros agrónomos a quienes toda literatura les trae al pairo



Ya hemos visto otra veces que estos comentarios despectivos se dan en ambas direcciones. Como atenuante a esta exageración, porque es una exageración, es casi imposible que TODA la literatura te traiga al pairo, diremos que AT se dirigía a una conferencia a la hora de la cena en invierno, creo recordar. Pienso que sintió envidia al ver a gente cenando calentito cerca de su cama, mientras él estaba aún lejos de esa situación ideal.

4 comentarios:

  1. ¿A quien trae más al pairo la literatura al hombre o a la mujer? Como estamos a vueltas con la paridad, refiero que en los club de lecturas que frecuento hay abundancia de mujeres y algún esposo acobardado.Como yo me fijo mucho en el personal, sigo refiriendo que, en los debates sobre el libro leído, ellos suelen ser más eruditos y sacan a relucir sus saberes profesionales; ellas tienden a juzgar y a comprender a los personajes de la novela mediante anécdotas de alguna tía que tuvieron.
    Hasta la tontifacia de Madame Bovary leia en el tren con su lamparita, como hemos visto en una entrada; creo que las mujeres de hoy, no las muchachas ni las niñas, son la última esperanza de las editoriales y de la literatura; las críticas, los premios y el engranaje del negocio lo llevan unos hombres que no digo que no lean pero leen para otra cosa
    Y la hora de comer es para comer y los ingenieros estaban en ello. No se puede ser sublime sin interrupción, también Homero a veces dormía

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  2. Grandes controversias las planteadas, dear Woman. Sobre actividades tradicionalmente femeninas, el otro día fui a una tutoría con la profesora de mi hija porque mi señora parienta no pudo ir y me sentí y sentí que me veían como a un padre divorciado. Estuve a punto un para de veces de referirme a la susodicha parienta como "su madre" o "la madre"
    Efectivamente, es incluso probable que los ingenieros leyeran algo en la cama antes de dormir y después de cenar.
    Saludos cordiales

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  3. pedro lópez garcía2 de diciembre de 2017, 19:34

    Muy buenas. Lo propuesto en esta ocasión hace que uno recuerde con cariño las lecturas de hace años ya. Literatos grandes que se acercaban a la ciencia a su manera bien particular que posteriormente fueron clasificadas como ciencia-ficción y dejando bellas obras. Stanislav Lem, Isaac Assimov, Mary Shiley o Ray Bradbury. Obras que sin duda recomendaría a cualquier chaval de letras o de ciencias si se dejara.
    Por otro lado quisiera comentar las pésimas instrucciones que nos dejan los comerciantes cuando nos quieren explicar los pasos a seguir para el montaje y puesta en marcha de sus productos

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  4. Buenos días Pedro
    Tengo pendiente desde hace mucho la lectura de Solaris. Me pasa que tengo el libro en casa porque me lo regalaron y muchas veces le doy preferencia a los libros que me prestan o saco de la biblioteca, pues a los míos los tengo por seguros y al final no los leo. También dicen que están bien las dos adaptaciones al cine que se han hecho.
    ¿Se refiere a las instrucciones orales al comprar el producto o a las escritas tipo manual? En las ferreterías he notado que disfrutan explicando cómo instalar o arreglar algo; si el explicador intuye que uno tiene formación universitaria se regodea en hacerle ver lo fácil que es y en utilizar vocabulario técnico. Hay artefactos misteriosos a los que es mejor no tocar, como la cisternas, imposibles de arreglar.
    Saludos cordiales

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