Además, eché un vistazo a mi libro de texto de estadística empresarial y descubrí que se tenía que haber hecho cálculo matemático, y yo ni siquiera había hecho trigonometría; en el último año del instituto había cursado Perspectivas sobre el Teatro Moderno en lugar de trigonometría, y me acordaba bien de que mi padre me había apretado las clavijas por ello. En realidad, mi odio al Álgebra II y mi negativa a hacer más matemáticas después de esa clase suscitaron una de las discusiones más fuertes que oí que mis padres tuvieron en los años previos a su separación, lo cual es una historia bastante larga, pero recuerdo haber oído que mi padre decía que en realidad solamente había dos clases de personas en el mundo: a saber, la gente que entendía las realidades técnicas de cómo funcionaba el mundo real (mediante las matemáticas y las ciencias, quería decir obviamente), y la gente que no las entendía, y a continuación oí que mi madre se enfadaba y se deprimía mucho por lo que ella consideraba la rigidez y la estrechez de miras de mi padre y le contestaba que en realidad los dos tipos básicos de personas eran la gente tan rígida e intolerante que creía que solamente había dos tipos básicos de seres humanos, por un lado, y por el otro la gente que creía que en realidad había toda clase de tipos y variedades de personas, cada una de ellas provista de dones únicos y destinos y caminos en la vida que encontrar y etcétera
Naturalmente el objetivo de este blog es suavizar la frontera entre ciencias y letras y disminuir el número de científicos que se refieren a las letras despectivamente y lo contrario, que ambas modalidades se dan. Pudiera pensarse en principio que este texto no ayuda a nuestro propósito pero no es así, piensen, por defender al padre, que yo creo que se enfadó no sólo porque no cogió Trigonometría, sino porque eligió una asignatura que no presupone nada bueno para un padre riguroso. Seguro que si hubiera cogido una signatura de letras más seria (Literatura, o algo así) no se habría enfadado tanto. Una asignatura llamada 'Perspectivas sobre el Teatro Moderno' le sugiere a mis prejuicios la presencia de un profesor calvo con coleta que habla de la importancia de expresar y canalizar los sentimientos e incluso la posibilidad de tener que comprarse unas mallas negras para expresarse mejor, como he oído que se hacía hace muchos años en un colegio del aljarafe sevillano
Qué alegría Diodoro verle otra vez por aquí con sus sagaces comentarios.
ResponderEliminarEn cuanto a la adivinanza de a woman, es de las más fáciles que recuerdo y yo mismo soy hermano de una asociación igual a la del título cambiando una sóla letra.
Saludos, saludos cordiales
Me agrada, querido Partre, el propósito de concordia, ese intento que dice Vd. de suavizar las fronteras entre ciencias y letras, que hay en su blog. Es posible también la interpretación que con tanta agudeza hace Vd. de la posición dura del padre del protagonista del texto. Pero sepa V. que hasta hace muy poco tiempo y en muchos sitios de España (Vd. ya sabe, del Estado) se decía que el arte y los silogismos y todo eso eran cosa propia de niñas y que los varones que se dedicaban a ello, eran varones poco viriles y más bien afeminados. Le puedo asegurar que yo lo he oido y vivido.A su vez, Heidegger, ese al que Vd. no se imagina, segtún dice, con el arte inigualable de los sureños, dejó escrito y dicho que la ciencia no piensa. Vea Vd. qué necesaria era y es la concordia que Vd. propone:la saludamos y le damos la bienvenida y quizás algún día llegue e estar incluso en los planes de estudio. ¿Por qué iba a ser menos que las mallas negras?
ResponderEliminarAtentos saludos
Querido Basin:
ResponderEliminarEs necesaria esa concordia, sí señor, tercera cultura o cultura total, da igual cómo la llamemos. Penosos tiempos aquellos en que los silogismos no eran considerados un oficio bien digno, incluso un arte, y en que a las niñas la única carrera de ciencias que les estaba permitida era la de Farmacia.
Si este blog contribuye a esa concordia lo doy por bien hecho y no nos encontraremos profesores de ciencias que escriben con faltas de ortografía en las facultades ni hombres de letras presumiendo de ignorar ciertos principios científicos.
Lo de las mallas negras es verídico y no ayuda a desterrar la infamia de poco viriles y afeminados como usted dice, de los hombres que se dedican al arte, si bien hay que reconocer que el teatro va fuera aparte
Vengaaa
Sostiene Wallace's opá que el personal se divide entre los que manejan las realidades técnicas y los que se hacen un lío.
ResponderEliminarLe rebate la omá con una paradojíca aporía : lo que de verdad hay no son dos tipos en el mundo,sino un primer grupo que cree que solo hay dos tipos en el mundo y un segundo grupo que cree que hay más tipos en el mundo. Ella se considera del grupo segundo , o sea de los que creen que el primer grupo solo admite dos tipos en el mundo.
Sobre el palabrerío me pregunto si intolerencia es la traducción del inglés intolerance, pero sostengo que los dos tipos de la humanidad de los que hablamos usan su propio lenguaje de secta , dícese la intolerancia de la fanática rigidez del otro grupo y llámase tolerancia cero a la firme defensa de los correctos principios del propio grupo.
En realidad la única intolerancia propia permitida es a la lactosa.
A woman
Ya de regreso continuo lecturas interesante blog suyo, Sr. Partre. Veo que no deben tratrse mal letras y ciencias (en mi pais decimos ciencias humanas y ciencias naturales, pero en España son ustedes mas excluyentes). Yo mismo (excusas por hablar de mi) estudie en bachiller las dos ciencias. Mas el texto de esta semana es interesante y tiene humor.
ResponderEliminarPor favor, qué es u n siloguismo? Nunca me habia enfrentado con este termino. Seguiremos contactos.
Animo y adelante, Mr. Partre
Dear woman:
ResponderEliminarEl texto corresponde al personaje conocido como Chris "Irrelevante" Fogle, que bien podría ser un alter ego autoparódico de Wallace. También yo me di cuenta de la paradoja final en la clasificación que propone la madre y que me recuerda a una frase de Homer Simpson: 'hay dos tipos de personas: los que saben contar y los que no'
See you later alligator
Estimado Apolonio
ResponderEliminarMe alegra mucho verle de regreso tras su año sabático en Oklahoma. Se ve que estudió usted el bachillerato en un sitio importante, quizá incluso citado en el Quijote, o así lo vi yo una vez en una cerámica.
No sé exactamente cómo definirle el silogismo, quizá Basin que cita a Heidegger pueda ayudarle, intente ponerse en contacto con él.
Saludos
adivinanza fin de semana
ResponderEliminar1.
Española,por el momento, pero no escrbió en español.Se llamaba como una gran fiesta de su tierra.
2.
Tuvo que viajar mucho,pero no por gusto.En 1940 en París, como la autora de la citada Suite Francaise, tuvo que huir ante la llegada de los alemanes.
3.
La protagonista de esta novela es una mujer, una saga de mujeres.Siempre las mujeres llenan sus novelas, hay también camelias y palomas y en esta algo que se rompe.
pd. Fetivamente se trataba de La hermandad de la buena suerte, Muchas pistas y enhorabuena a los acertados.
A woman
Dear woman:
ResponderEliminarmira que hay muchas y concretas pistas, pero ahora mismo no caigo
Dos precisiones a las adivinanzas de a Woman
ResponderEliminarla primera es que el personaje nombrado de la novela Suite Française de Irene Némirosvsky se apellida Péricand, no Pericard
la otra, ha olvidado decir el autor de la hermandad de la buena muerte, Fernando Sabater.
Respecto a la última, para los que conocemos la buena literatura del siglo XX, reconocemos a una gran escritora e interesante mujer desgraciadamente poco conocida ahora aunque alguna de sus novelas, no ésta, ha sido llevada al cine.
Gracias a este amable anónimo ya llevo más encaminada la adivinanza. Ahora bien, sobre la anterior, es 'La hermandad de la buena suerte', no muertey Savater es con uve, que si no Amador sería hermano de Leticia Sabater.
ResponderEliminarSaludos
Adivinanza fin de semana
ResponderEliminar1.-
Nuestro autor vio la luz allá donde es fama que las torres no son bienes inmuebles.pero completó su vida en tierra de fados.
2.-
De dicha tierra y del árbol que da peras toma el apellido el protagonista de la novela.
3.-
también se hizo película sobre este atormentado periodista . La novela comienza con las palabras que dan título.
Pd. Muy bien por el acertante, y los errores son disculpables porque los ordenadores son muy traicioneros, así como la memoria, así como el subconsciente, así como la prisa,así como....
A woman
Creo que será siempre difícil que los de un bando no menosprecien cuando menos a los del bando contrario. Así podríamos comparar (en una comparación no muy adecuada) lo que sienten algunos de ciencias hacia las letras y viceversa. El propósito de J.S.P. es muy loable y ojalá lo consiga, aunque fuera sólo en un mínimo porcentaje.Lo malo es que cada cual tiene la tendencia a observar casi exclusivamente una humilde, pero en tiempos pasados muy importante parte de su anatomía: su precioso o feo ombligo.
ResponderEliminarLo de las mallas negras me ha intrigado. ¿Indica ese color el luto o pesar que sienten nuestros miembros inferiores al no poder expresarse como lo hace la parte más alta de nuestro organismo? ¿O puede ser que las piernas interfieran nocivamente en la manera de expresarnos y por ello sea necesario que desaparezcan en la oscuridad de un escenario? Me doy cuenta de que estoy desvariando y por mucho que pienso no consigo aclararme,no sé si la locura está en mi cabeza o en las mallas de las piernas. En fin, agradeceré la ayuda que algún bloguero pueda proporcionarme. Por si acaso intentaré embutirme dentro de la dichosa prenda cuando tenga que hablar delante de cualquier tipo de público, ya que suelo hacerlo fatal y quien sabe...
Saludos de Evanesc Ente
A nivel de secundaria, a muchos de los que no les gustan las ciencias, no les gustan por el simple motivo de que consideran que se les dan mal. Y así, a los miedos a la ciencia que tan bien expone Pavese en la entrada anterior, habría que añadir el miedo simplemente a la asignatura en sí. Así, en ocasiones, el alumno que considera que se le dan mal las matemáticas le dedica a ellas menos tiempo que a cualquier otra porque considera que tiene un motivo para que le vaya mal: su torpeza en ellas. Pero en mi opinión se le dan especialmente mal porque no les dedica tiempo ni esfuerzo basándose en su excusa. Como me dijo un alumno justo al acabar la primera clase del curso: “yo quería avisarle que yo, en matemáticas, soy más cortito que un fandango”. Y ahí deja su excusa, con una comparación bonita uniendo las ciencias con el arte.
ResponderEliminarEstoy contenta porque se me la adivinanza de esta semana.