lunes, 23 de septiembre de 2019

GENERACIÓN A (DOUGLAS COUPLAND) Y EL FINAL LÓGICO DE LA CIENCIA FICCIÓN

La vida real también puede parecerse a un mito de ciencia ficción. Por ejemplo: mi padre se pasa cinco días a la semana en el CERN, en la parte francesa de Ginebra, y prácticamente está a unos poco centenares de metros del Gran Acelerador de Hadrones; dentro de poco mudarán su oficina cerca del Anillo de Antiprotones de Baja Energía. Si eso no es ciencia ficción, no sé qué cosa puede serlo


Igual que todas las cosas que vaticinaron las novelas de Julio Verne, que perdieron la "ficción" de ciencia ficción  a posteriori, puede ocurrirle a todo el género a priori. Cuando no quede nada por descubrir, ¿quedará algo por imaginar?

4 comentarios:

  1. Leí hace poco en el libro "El loro de Flaubert" de Julian Barnes lo siguiente:
    "Los libros dicen: ella hizo esto porque. La vida dice: ella hizo esto. En los libros las cosas quedan explicadas; en la vida, no."
    Quizás por eso la vida parece en ocasiones ciencia ficción. En cuanto a la literatura, no todo está perdido. Aunque no quede apenas nada por descubrir, lo que quede por imaginar dependerá del autor y cómo nos lo explique.
    Saludos.

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  2. Qué bien que reapareza por el blog, Agnes
    Esta otra explicación de por qué a veces la vida parece ciencia ficción también está muy bien y no es muy distinta de la que propone Douglas Coupland
    Hablando de ciencia ficción, yo he visto este fin de semana Ad Astra y me ha decepcionado un poquiito

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  3. Y asína (que las palabras también tienen su ciencia-ficción) iban nuestros antepasados de la viña a despuntar sarmientos al olivar, que ellos sí que producían cosas tangibles. Y mucho antes los dinosauros se afanaban por los campos de Soria sin que su miaja de cabeza pronosticara su desastre.Como ellos la curiosidad puede desaparecer pues los humanos por muy llanos que sean no se inmutan ni por los protones ni por los hadrones. El que más o el que menos tiene un pariente trabajando en el CSIC.

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  4. Dear Woman
    Hablando del CSIC, entidad con el pecado original de nacer en el franquismo, el otro día escuché una entrevista con su directora. Tienen alguna follina montada porque vana a cambiar su estructura, es una entidad muy curiosa que colabora con las universidades.
    No se me va de la cabeza la imagen de los dinosaurios afanándose por Soria, por donde más tarde haría una gira la Paca y se forró, la hija la gran puta
    Vengaaaaaaaaaa

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